Pará las Orejas!

Publicado por Mocker , sábado, 24 de septiembre de 2011 12:51

The Pains of Being Pure at Heart: "Belong" (2011)

Hace ya varios años, y cada vez con más asiduidad, analizar un grupo de rock nos lleva a la tarea de encontrar paralelismos, similitudes e influencias con bandas históricas que crearon una escena o estilo, y que siempre serán el espejo en el cual reflejarse de las venideras. Admitámoslo, cada vez que escuchamos un disco caemos en la frase común de “Esto me suena a…” y de ahí en más estamos balanceándonos sobre el fino hilo del prejuicio porque creemos que todo tiempo pasado fue mejor. De todas maneras, siempre es bueno encontrarse con alguna banda que “refresca” esos sonidos que alguna vez encontramos en bandas anteriores. Ejemplos hay muchos y los podemos encontrar a la vuelta de la esquina, sin embargo nos vamos un poco más lejos esta vez, más precisamente a New York para descubrir a la novel banda The Pains of Being Pure at Heart.

Detrás de ese nombre tan largo asoma un grupo de cuatro jóvenes -ahora quinteto- integrado por cuatro hombres y una chica que empezó a dar sus primeros pasos con un sonido que tiene unas influencias bien marcadas. Como si se tratara de una receta de cocina, ellos van agregando ingredientes, en este caso estilos, para definir su sonido. El ingrediente/estilo principal es el Shoegaze de Jesus and Mary Chain y My Bloody Valentine, pero le agregan una pizca del Noise Pop de Teenage Fanclub, unas gotitas del Indie Pop de The Pastels, una cucharada del Twee Pop de Belle and Sebastian y salan a gusto con las voces etéreas del Dream Pop.

El grupo se formo en el año 2007 y recién llego a su primer larga duración en el 2009 con su disco homónimo el cual alcanzó unas críticas interesantes. De forma paralela, y casi en una rareza absoluta para estos tiempos, ellos fueron lanzando singles como adelanto y hasta un Ep como es “Higher Than The Sun”. No está demás mencionar que el lanzamiento de canciones en los formatos tradicionales de reproducción musical se convierte por estos días en un fetichismo sólo para algunos. Los comentarios de la crítica especializada sobre su primer disco dejaron en alto las expectativas para un segundo álbum y no defraudaron con el lanzamiento de su más reciente Lp llamado “Belong”. El disco no marca ninguna revolución musical pero sin embargo mejoran lo bueno que ya habían hecho en el primero y nos trae un poco de aire fresco, eso sí, revisando viejas páginas del rock con grupos que ya transitaron un camino similar. Mucho de esto se debe a que la producción de este sonido estuvo en manos de la dupla de Flood y Alan Mulder (My Bloody Valentine/Depeche Mode/Nine Inch Nails/Smashing Pumpkins entre otros), los cuales definieron las guitarras, voces y baterías de este “Belong”.

El Lp arranca con el tema homónimo al disco y se nos presenta con unas guitarras bien al frente, pero después van dejando paso a la melodía y funcionan como el típico “colchón” sonoro del Shoegaze dándole lugar a las voces etéreas. De entrada ya el disco nos cae simpático y fresco a la vez. Siguen con “Heaven´s Gonna Happen Now”, un tema adictivo y que rápidamente se puede posicionar dentro de los posibles Hits del álbum. “Heart in Your Heartbreak” suena con un bajo bien firme al frente que va marcando la línea del tema. El tema está muy bien producido y se ve que hay un gran trabajo de estudio. Sin dejar de sonar roqueros los sintetizadores se hacen presentes con “The Body” y “My Terrible Friend”, dos temas un poco más bailables que los anteriores y que le dan otro dinamismo al disco.

La calma viene con “Anne With an E”, un tema de características muy similares al “Just Like Honey” de los Jesus and Mary Chain y que también lo convierten en una adicción por sus voces y arreglos. Para dejar bien en claro que la banda escocesa es inspiración absoluta en ellos escuchen “Girl of 1000 Dreams” un tema que nos tenemos que fijar en el booklet interior para certificar que no tiene la firma de los hermanos Reid. Muchos pueden decir que con esto pierden mucha personalidad, puede ser, pero -¡que bien imitan a sus maestros estos alumnos!-. Los temas “Even in Dreams” y “Too Tough”, redondean un disco al que le sobra emotividad y sensibilidad -el nombre del grupo significaría los dolores de ser puro de corazón- sin perder su pulso roquero.

El cierre del Lp lo da “Strange”, un tema que bajo su ritmo hipnótico de voces etéreas, arreglos de guitarra y sintetizadores calzan justo para finalizar un disco que más allá de tener muchas similitudes con varios grupos anteriores a ellos nos deja un muy lindo sabor de que se puede revisitar estilos sin quedar en una mera copia y posicionándolos como uno de los mejores trabajos del 2011.

El Infaltable

Publicado por Mocker , domingo, 18 de septiembre de 2011 19:58

Elvis Presley: "Elvis is Back!" (1960)

Segundas partes nunca fueron buenas. Esta frase resume de forma tajante una particularidad que siempre se la asocia con las secuelas en el Cine, pero que muchas veces se puede aplicar a otras corrientes artísticas. En el ámbito de la música esta afirmación también puede tener lugar o aplicarse a las reuniones de algunos grupos luego de varios años de separación e incluso también cuando un artista vuelve al ruedo luego de un retiro. Sin embargo, siempre existen las excepciones a la regla y una de ellas son las dos vueltas o las dos “segundas partes” que se le dio a la carrera de Elvis Presley al volver a los primeros planos de la industria musical.

El aporte de Elvis al rock es innegable, sin embargo, su carrera musical no siempre fue en continuo ascenso y muchas veces anduvo a la deriva al editar discos intrascendentes, mucho de esto forzado a que la carrera artística de él no sólo se abocaba a la música sino también al Cine y con esto llevaba su consecuente edición de Lp´s que contenían la banda de sonido de tales Films. Que Elvis haya dejado un poco relegada a la industria musical para abocarse al Cine tiene varios motivos, uno de ellos es porque él realmente quería entrar dentro de ese mundo Hollywoodense, de todas maneras Elvis como actor es un gran músico y con esto esta todo dicho. Otro de los motivos era que por aquel entonces su manager, Tom Parker, quería “explotar” la imagen de Presley no sólo dentro de la música sino también apuntar al mercado audio visual.

Antes dijimos que la carrera de Elvis tuvo dos regresos, una de ellas fue en 1968 donde se filmo un especial navideño de televisión que volvió a reubicarlo dentro de las primeras figuras de por aquel entonces. No está demás recordar que a fines de los ´60 el Rock ya era otra cosa y la escena musical junto con sus principales artistas muy poco tenía que ver con aquel Rock and Roll de mediados de los ´50. Los Beatles, Stones, Dylan y toda la escena de San Francisco junto al Flower Power de los Hippies era lo que se consumía por aquel entonces. Sin embargo la vuelta de Elvis sería en grande y además de filmar este especial lanzaría uno de sus mejores Lp´s como es “Elvis in Memphis”. Elvis vuelve por su cetro y corona demostrando que su talento estaba intacto.

De todas maneras, su primer “regreso” al Rock fue mucho antes de esto, más precisamente en 1960, luego de un breve paso por el Ejército de su país del cual no pudo eludir su convocatoria. No está demás recordar que para fines de los ´50 todas las estrellas de ese temprano Rock and Roll estaban en jaque, Little Richards dejo la música por la religión, Buddy Holly murió en un accidente de avión, Jerry Lee Lewis y Chuck Berry tenían problemas legales por salir con menores de edad y Elvis Presley fue llamado por el Tío Sam para unirse a sus filas.

La vuelta de Presley al Rock fue mucho más que una expectativa, alimentandose su figura tras cada día que pasaba sin novedades musicales de él. Por este motivo, Tom Parker, rápido de reflejos en materia de números no dejó que se le fuera ese diamante al ejército sin sacar ninguna tajada. Parker empezó a promocionar la imagen de Elvis sacándole fotos con ropa militar para luego editar simples e ir lanzándolos con el fin de mantenerlo en los rankings hasta que terminara su paso por la milicia. Sencillos como “It´s Now or Never”, “Are You Lonesome Tonight?”, “Stuck on You”, “Fame and Fortune” o “A Mess of Blues” entre otros fueron apaciguando la espera de los fanáticos. La vuelta pública oficial de Elvis, licenciado con el rango de Sargento, fue el 12 de Mayo de 1960 como invitado al programa de TV de Frank Sinatra mientras que el regreso al larga duración fue con “Elvis is Back!”.

Este Lp marcó el regreso de Elvis al Rock, al cual había tenido que dejar por su paso por la Armada de EE.UU. El disco es uno de los mejores de Elvis sin duda alguna y obviamente no es el disco “relleno” que muchas veces estuvo obligado a hacer para apoyar sus películas los cuales contenían los temas que integraban las mismas. En este disco la voz de Elvis esta impecable y la banda de apoyo suena muy ajustada y precisa, los doce temas que integran la placa son muy buenos y no sólo se ajusta al Rock and Roll con el cual se hizo conocido sino también tiene espacio para las baladas, el Doo-Woop y el Pop.

Temas bailables como “Make Me Know It”, “Dirty, Dirty Feeling“ o “Such a Night” se mezclan con el clásico “Fever”, “Like a Baby”, “Reconsider Baby” o “It Feels So Right” donde la cadencia rítmica y sexual típica de Presley que pone al cantar le dan todo un ambiente y una estética a cada tema en particular. Pero también hay lugar para el público femenino y se lo reserva con las baladas “The Girl of My Best Friend”, “I Will Be Home Again”, “Thrill of Your Love” o “Soldier Boy”.

Sin dudas “Elvis is Back!” es uno de los puntos más altos de su carrera y se encuentra dentro de los mejores discos no sólo de su discografía sino también de la historia del Rock.
No está demás mencionar que a mediados de 2011 se edito una Deluxe Edition de este disco donde además de traer el Lp completo agrega todos los simples editados de esa época, los cuales se menciono más arriba. Sin embargo, esta reedición no sólo se ajusta a este Lp sino que también trae el disco “Something For Everybody” y los simples respectivos que salieron durante su edición. En una línea de tiempo el disco “Elvis is Back!” se editó en 1960 y luego de este vendrían “G.I. Blues” -banda sonora de la película del mismo nombre-, “His Hand in Mine” -dedicado enteramente al Gospel- y luego editaría este “Something For Everybody” en 1961. Se festeja y se recibe con los brazos abiertos esta edición doble donde se “rescata” un Lp que dentro de la discografía de Elvis no es muy tenido en cuenta -quizás por la falta de Hits recordables- pero que también se encuentra dentro sus mejores trabajos. El Rey ha vuelto, una vez más, viva el Rey.

Popcorn

Publicado por Mocker , viernes, 9 de septiembre de 2011 12:31

The Rolling Stones: "Rock and Roll Circus"

El circo del Rock and Roll. Esta frase hoy en día tiene muchos ribetes, desde el mainstream que se creo en torno a los artistas, el coqueteo con las marcas que auspician a tal o cual grupo y no nos olvidemos también de los excesos -contenidos en su justa medida- de esos mismos músicos. Tampoco dejemos de lado la exposición mediática en TV y diarios que ellos mismos hacen de su vida personal, dejando en un escalón muy por debajo a la crítica discográfica que pueda aparecer en las revistas especializadas de música. Sin embargo, mucho antes de que esta frase se imponga como una marca registrada hubo un Circo, uno que tuvo toda esa magia que rodea y encumbra a esa gran carpa de diversión. Un Circo sin payasos, enanos, malabaristas y animales no se podría llamar de tal manera y este contaba con todo eso y más. Justamente esto último, ese “más”, lo puso la música, y no cualquiera sino el Rock and Roll cuyos maestros de ceremonias fueron Nuestras Majestades Satánicas los Rolling Stones como artista principal.

El Rock and Roll Circus -nombre correcto- del especial de televisión grabado en 1968 para la BBC fue creado en base a una idea conceptual de Mick Jagger y Keith Richards con el fin de montar un espectáculo de payasos, malabaristas, equilibristas, enanos y todos los personajes circenses compartiendo escenarios con los Stones y un compendio de músicos invitados y amigos como fueron John Lennon y su inseparable Yoko Ono, The Who, Jethro Tull, Eric Clapton, Mitch Mitchell, Taj Mahal y Marianne Faithfull entre otros. Lo que hoy es considerado como un documento de colección dada la calidad fílmica y artística que lo componía, hasta mediados de los ´90 era considerado un objeto casi de culto ya que luego de la grabación de este especial los Stones decidieron no lanzarlo comercialmente.

Los rumores de que no se haya estrenado en su momento fueron muchos y ninguno confirmado, desde el no haber quedado conformes con el resultado final hasta el supuesto celo que le había dado la performance que tuvieron los Who creyendo que podían opacar la actuación de los Stones. Este especial recién vio la luz en 1996 estrenándose en pantalla grande y su consecutiva edición en DVD en el 2004 terminando con muchos años de un documento que sólo estaba archivado penando por su ostracismo. De más está decir que ediciones piratas o bootlegs eran las que sobraban y que se podían conseguir en cuevas de discos pero sin embargo la edición oficial -con todas las mejoras que eso implica- se hizo esperar. El especial se filmó entre el 11 y el 12 de Diciembre de 1968 en Londres y como dato sobresaliente a cada persona que estuvo durante la grabación del mismo se le entrego una capa-piloto de color amarillo y naranja. El motivo de la elección de este uniforme nunca fue aclarado sin embargo lo que se buscó, y esto queda de manifiesto en este documento, es que haya una interacción entre el público y los artistas en escena.

El especial se abre con una introducción de Mick Jagger, vestido para la ocasión como un maestro de ceremonia circense, el cual va presentando los números siguientes con un acento especial casi en solfa para darle paso a la típica fanfarria de Circo donde salen a escena los artistas disfrazados. La música llega con Los Jethro Tull y la canción “A Song For Jeffrey”. La banda de Ian Anderson para ese entonces recién estaba dando sus primeros pasos y cuenta dicha actuación con una “perlita”, en guitarra se encuentra Tony Iommi, pieza clave de los también venideros Black Sabbath. Luego de las piruetas de Anderson junto a su flauta traversa aparece Keith Richards con sombrero de copa, fumando un habano y con un parche pirata en el ojo derecho para presentar el próximo número musical.

Los siguientes artistas que salen a escena son The Who, que se despachan con “A Quick One While He´s Away” con su clásica introducción vocal incluida. La actuación de ellos combinó, bien fiel a su estilo, potencia, espectáculo y una mejor puesta en escena. No está demás recordar que por ese entonces los Who ya habían dejado de ser los simples chicos Mod para empezar a componer temas más elaborados como la denominada Opera Rock “Tommy”. Por supuesto y como transición a este paso en sus discos comenzaron a componer mini-suites como la que ejecutaron en el Rock and Roll Circus. Luego de estos números musicales vuelve la fanfarria circense y le cede el escenario principal a los trapecistas que después de este show le dan espacio de nuevo al rock con Taj Mahal. El mismo se despacha con un tema bien enérgico como es “Ain´t That a Lot of Love”, que no desentona para nada y sirve para conocer a un artista muy interesante de los ´60 que hoy a la distancia es demasiado subvalorado. Si antes la presentación musical la hizo Richards ahora el turno le toca a Charlie Watts para hacer lo mismo con la por aquel entonces novia de Mick Jagger, Marianne Faithfull para cantar “Something Better”. De todo el especial quizás es el punto más flojo dicha actuación pero sirve para bajar un poco la adrenalina que luego nos va a volver a subir con las próximas actuaciones.

Promediando ya la mitad del especial nos encontramos con una conversación -relajada y casi absurda en tono de comedia- entre Jagger y Lennon, los cuales se presentan con unos nombres inventados (Nigel y Winston) donde Lennon viene al Rock and Roll Circus para presentar a su supergrupo. Esto último se hace realidad cuando en el escenario vemos a Mitch Mitchell, baterista de la Experience de Jimi Hendrix, Eric Clapton por ese entonces con Cream en la guitarra, Keith Richards en el bajo y John Lennon en guitarra rítmica y voz.

El grupo en cuestión y sólo creado para esta actuación se llamó The Dirty Mac y ejecutó una muy sentida versión de “Yer Blues” de los Beatles. Esta performance es uno de los puntos más altos del especial donde la voz de Lennon es tan o más punzante que en la versión original, por su parte Clapton literalmente la “rompe” con el punteo, Richards no cede nada de protagonismo y ejecuta su bajo de forma sucia y potente y Mitchell aporrea la batería. No está demás recordar dos puntos importantes e interesantes, la buena onda que había entre Beatles y Stones siempre existió y la rivalidad que se creó en torno a ellos fue parte más de la prensa que del lado de los integrantes de cada grupo en cuestión. Por otra parte, la actuación de Lennon fue la primera aparición que hizo sobre un escenario sin contar con los Beatles como grupo de fondo. Por el año 1968 los Beatles ya se encontraban muy distanciados y los roces entre cada uno de ellos ya se estaban volviendo bastantes problemáticos. Luego de “Yer Blues”, a los Dirty Mac se les une Yoko Ono, siempre presente por esos años en la vida de Lennon, para interpretar “Whole Lota Yoko”. Por el bien de sus oídos es recomendable pasar en Fast Forward esta parte y detenerse justo en la presentación de Lennon que utiliza de forma ridícula y sin sentido un lenguaje de señas para presentar el próximo número.

El plato principal y cierre de show es para los Stones que realizan una gran performance con “Jumping Jack Flash”, la blusera “Parachute Woman”, las sentidas “No Expectations” y “You Can´t Always Get What You Want” para terminar con la incendiaria “Sympathy For The Devil” donde Jagger termina en cuero y mostrando en el torso un tatuaje con la figura del demonio. Luego de esta actuación solo resta el final donde están los Stones mezclados entre el público vestidos con esas capas de colores para cantar a coro la canción final “Salt of The Earth”. Un desenlace justo para coronar y cerrar la carpa de este Circo de Rock and Roll que se abrió allá por 1968 y que siempre vuelve a inflar su estructura cada vez que miramos este film.


Jethro Tull - "A Song for Jeffrey"




The Dirty Mac - "Yer Blues"


The Rolling Stones - "Jumping Jack Flash"

Made in: Argentina

Publicado por Mocker , jueves, 1 de septiembre de 2011 14:43

A Estos Hombres Tristes

Dentro de un grupo de rock el cantante siempre fue, es y será la cara visible de la banda. En la mayoría de los casos se ubica al frente de ellos y es reconocido de inmediato por el público, quedando en la memoria la imagen de él y siendo la cita obligada en una entrevista, nota o critica periodística. Sin embargo, un grupo no se reduce sólo a la figura que esta al frente sino que es la composición de varios integrantes, los cuales en muchas ocasiones comparten autoria de forma completa o parcial en la composición de los temas, un detalle para nada menor. De todas maneras, si empezáramos a nombrar a los integrantes de los grupos más reconocidos, siempre caeríamos en la obligada mención del o los cantantes de la banda. Esto sucede en todo el Rock Internacional y nuestro Rock vernáculo no es la excepción a la regla. Por este motivo si decimos Sumo, lo primero que se nos viene a la mente es la imagen de Luca Prodan, si hacemos lo mismo con Soda Stereo la regla se repite con Gustavo Cerati y así sucesivamente. Con el grupo Almendra, puntal del Rock Argentino, sucede algo similar. La imagen, trayectoria y legado de Luis Alberto Spinetta es muy grande y nadie puede negar el aporte hecho no sólo a nuestra música sino también a la música mundial. De todas maneras, dentro de ese grupo fundamental de nuestro rock hubieron integrantes que estuvieron muy a la altura de las circunstancias y los cuales tuvieron una muy buena trayectoria musical.

Esta excelente calidad artística quedó demostrada luego de la disolución de Almendra, donde de sus cenizas nacen otros tres grupos más, Pescado Rabioso integrado por Spinetta, Color Humano fundado por Edelmiro Molinari y Aquelarre creación de Emilio del Guercio y Rodolfo García, los cuales integraban la base rítmica de Almendra. El espíritu inquieto de Spinetta lo llevó a formar varios grupos más luego de Pescado Rabioso como lo fue Invisible -de corte más progresivo- y también Spinetta Jade, con sus influencias más de Jazz-Rock. Su carrera prolífica no se detuvo sólo en la formación de grupos sino que también supo pergeñar discos solistas de muy buena calidad que alimentaron su carrera individual. La trayectoria del flaco y algunos de sus discos solistas son más que conocidos, sin embargo muchas veces se olvida de mencionar que sucedió con los otros ex integrantes de Almendra.

Edelmiro Molinari "Edelmiro y La Galletita" (1983)

Unas líneas más arriba se menciono que Edelmiro Molinari formo ese grupo de Rock con tintes psicodélicos y folk llamado Color Humano en el cual edito tres discos de muy buena calidad. De todas maneras, muchos luego de este grupo le han perdido el rastro y sólo volvieron a vincularlo con la música en la primer reunión que tuvo Almendra allá por comienzos de los ´80. Esta nebulosa que se creó en cuanto a la carrera artística de Molinari se debe en parte a que luego de la disolución de Color Humano se radicaría en EE.UU y volvería recién a la Argentina en el año 1979. El rock para ese entonces había ya cambiado demasiado y además la edición de discos cada vez se hizo más limitada por el contexto socio-político por el que estaba atravesando el país. Incluso las presentaciones de grupos de rock no eran muy bien vistas por el ojo censor del gobierno militar. Molinari a pesar de esto, decide formar un grupo de apoyo llamado La Galletita presentándose en los escenarios porteños y contando con la presencia de Alejandro Pensa en batería y un aún ignoto para muchos Skay Beilinson -los Redonditos editarían luego de muchos años su primer Lp recién en 1985-en guitarra.

De esta formación sólo hay registro de un disco llamado “Edelmiro y La Galletita” lanzado recién en 1983. El trabajo no contó con la difusión necesaria y termino convirtiéndose en un disco de culto y se encolumnó dentro de esas “rarezas” donde siempre el coleccionista termina “chapeando” al citarlo como -el álbum donde toca Skay-. El Lp sólo tiene 8 canciones donde el espíritu del mismo tiene un sonido bien de los ´80, calmo, donde se ejecuta un Rock bien soft como “El Remolcador” o “Cero a Uno” muy acorde a esos años, con unos interesantes arreglos de guitarra donde tiene ciertos toques de Blues, Jazzeros como “El Vuelo 144” o “Cada Semana” y de Ritmos Latinos edulcorados como “El Caderón” o “Caigo y me Levanto”. A pesar de que su duración sea muy corta, el disco se deja escuchar de forma más que amena por la calidad de sus canciones. En el mismo año Spinetta lanzo “Mondo di Cromo”, un disco de muy buena calidad sonora y que tiene dos temas clásicos dentro del repertorio del flaco como son “Yo Quiero Ver un Tren” y “No Te Alejes Tanto de Mí”. De todas maneras, pareciera que ese año de 1983 fuera el elegido por los ex Almendra para la edición de sus trabajos solistas, ya que junto a los discos de Spinetta y Molinari se le suma el “Pintada” de Emilio del Guercio.

Emilio del Guercio "Pintada" (1983)

Hagamos un racconto de la historia artística de Del Guercio tal cual como lo hicimos con Molinari. Del Guercio luego de Almendra forma junto a Rodolfo García el grupo Aquelarre el cual edita 4 discos y cosechó una carrera prolífica. Luego de esto forma La Eléctrica Rioplatense con ritmos muy influenciados por el Tango, el Candombe y el Folclore. Sin embargo con esta banda no logra grabar ningún material y decide luego de esa famosa reunión de Almendra lanzarse como solista. Su primer trabajo es un disco de 7 canciones, donde los ritmos utilizados son los que venía ejecutando con su banda anterior agregándole toques Jazzeros y ritmos del Río de La Plata. Por estos motivos no es de extrañarse que aparezcan músicos como el “Chango” Farías Gómez en la percusión y Luis Borda en la guitarra. Esa apertura de estilos se puede apreciar en la ejecución de temas con sonido Folclórico pero llevados hacia un ritmo más Pop. Esto queda de manifiesto al escuchar en esas sensibles canciones, bombos y acordeones, los cuales provienen de una raíz más tradicional pero que son maquillados bajo un sonido Pop.

El disco -para bien o para mal, según quien lo mire- es un trabajo que lleva marcado a fuego la fecha de su edición, tiene el típico sonido de Fusión Rock de los ´80 como en “Trabajo de Pintor” o “Verano Español”, coquetea con ritmos autóctonos como “Aroma del Lugar”, canciones más intimistas o reflexivas como “Para Darme” o “Miéntete Más, Divino Tesoro”. Más allá de ser un disco no muy “popular” en cuanto a ventas, Del Guercio se reservo un tema como “Imán” que tiene aires de pequeño hit por su estribillo adictivo y contagioso.
La última pata de los ex Almendra la cierra Rodolfo García, el cual toco en muchos de los trabajos solistas de renombrados artistas como Litto Nebbia, Spinetta o en grupos como Tantor además de Aquelarre y el mencionado Almendra.

Por supuesto el mejor “parado” de los ex Almendra dentro de la historia de nuestro Rock fue y es Luis Alberto Spinetta, sin embargo nunca esta demás revisar lo que hicieron los otros integrantes que lo rodeaban y darle su cuota de crédito que a veces el tiempo suele borrar o llevarse.